La marca profesional y la gestión de la reputación son tareas irrenunciables para quienes hacen relaciones públicas. También se convierte, en un tema a tratar de los comunicadores organizacionales y en un dolor de cabeza de los consultores políticos. Para los ejecutivos y personas que laboran en relación de dependencia son una inversión en ese activo más importante y su verdadero patrimonio: su marca personal con el enfoque para gestionar sus diferenciadores profesionales frente al resto del mercado.
Para trabajar en la marca personal y profesional primero debemos saber en qué etapa estamos. Por eso aquí te compartimos un diagnóstico de tu marca para que lo apliques de inmediato.
En los negocios y en el campo laboral, la imagen, la marca personal y la reputación son la base de todo porque generan CONFIANZA. Las personas y los clientes potenciales toman en cuenta esos elementos al formar una percepción sobre ti, tu propuesta o negocio.
La reputación es imprescindible para los voceros, para los CEO, para los jefes, para los vendedores, para quienes hacen servicio al cliente, es decir para todos. Y, a veces, en las empresas se pierden entre el uso correcto del uniforme como detalle primordial, y hoy en el mundo del trabajo remoto, la reputación va más allá.
¿Quién se encarga de gestionar la marca personal, profesional o laboral?
En tu empresa, ¿está a la deriva la gestión de la reputación?… ¿Tienes un código, manual o políticas básicas que sirvan no como una camisa de fuerza, sino más bien una guía para impulsar tu marca personal y aportar a la marca empleadora de tu organización. Si quieres leer más sobre reputación en empresas y ejecutivos lee este newsletter.
Hay muchos recursos y herramientas disponibles para que arranques la gestión de reputación de tu marca profesional y las redes sociales con propósito.
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